Aquí tenemos al tema que me refiero:
Y es que no es la primera vez (en este caso, la imágen pertenece al álbum El dopaje... ¡qué potaje (2007)) que los agentes "rasos" ponen verdes a Mortadelo y Filemón pensando el nivelazo que tienen en la organización, y los aparatos supermodernos que creen que tendrán, antes de toparse con la realidad.
Esto siempre resulta ser (por parte del autor, al menos), pura ironía. ¿Por qué? Porque... ¿quién, después de años de leer a Mortadelo y Filemón, afirmaría que son los "enchufados"? Hagamos un repaso rápido...
En primer lugar: Mortadelo y Filemón son siempre las cobayas de Bacterio. Prácticamente todos los experimentos de Bacterio pasan por las manos de los agentes para que se aseguren de que no hay fallos... y si los hay, que no se pierda gran cosa, por supuesto.
También les tocan misiones que pueden considerarse menores, como cuidar de la perra "Leididí" (en La perra de las galaxias), o las que aparecen en las historietas cortas teniendo que buscar algún ratero, o similares.
Y también, por supuestos, las misiones más peligrosas, pero no por su talento especial, sino por, al igual que al probar los experimentos de Bacterio, evitar que los agentes valiosos se pierdan. Aquí está seguramente la lista más larga: Mortadelo y Filemón se han tenido que enfrentar a monstruos y extraterrestres (Los monstruos por un lado, y casos como Los invasores y Espediente J), pelear contra bandas mafiosas ellos dos solos (Contra el "gang" del Chicharrón y El caso del bacalao), por no hablar de sus viajes al espacio (La M.I.E.R./El cacao espacial) o por el tiempo (Siglo XX... ¡qué progreso!/El dos de mayo/El quinto centenario).
Y claro, más de uno pensaría que esos casos son un privilegio... pero claro, eso siempre depende del punto de vista.
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